Desarrollo de la inteligencia emocional: Permite el autoconocimiento, conocer el interior e identificar emociones y sentimientos, modificando así, áreas del cerebro que están relacionadas con el control de las emociones.
Mejora las relaciones sociales: Permite aumentar sentimientos de positivismo, en el ámbito propio y que luego se expande hacia el resto, disminuyendo el aislamiento social.
Atrae pensamientos positivos y reduce riesgos de depresión: Pensar positivo atrae situaciones positivas; siendo la meditación una gran herramienta generar este tipo de pensamientos.
Estimula y ayuda a el sistema inmune: Estudios donde diversos pacientes se sometieron a un programa corto de meditación, aumentaron anticuerpos, en comparación con aquellos que no.
Puedes leer acerca de la mentalidad como pilar de la salud aquí.
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